El lago Chungará fue testigo de mi llegada, que a decir verdad, fue complicadísima. Cruzar desde Bolivia fue un parto. La subida era interminable y el fuerte viento en contra no me dejaba ni siquiera avanzar caminando. Finalmente pude llegar a el hito, a unos 4700 m.s.n.m y empezar a bajar a la belleza natural que es el Chungará, junto al Parinacota como protagonista principal y punto de partida de la ruta de los volcanes. El volcán es una maravilla y pegado a el esta el Pomerape. Ambos tienen 6348 y 6282 metros del altura respectivamente, siendo un destacado destino turístico en la XV región de Arica y Parinacota para la práctica del andinismo. El día había sido duro y yo estaba exhausto. Entre medio tuve una discusión bien acalorada con el viento, ya que este simplemente no me dejo avanzar por unas buenas horas.
Ya de noche, llegué al refugio de la Conaf, justo frente al lago y al volcán con una vista que todos quisieran tener. Ahí estaban Hans y Esteban, guardias del parque nacional, quienes se portaron un 7 conmigo y fueron los mejores anfitriones que podría haber tenido.
Disfrutamos de un rico plato de tallarines después de la sufrida y largo jornada que había tenido de pedaleo, junto a unos vasitos de vino y una entretenida conversa. Los dos era de Arica y hace un mes que estaba de guarda parques. El refugie era muy acogedor y de verdad daban ganas de quedarse por lo menos una semana ahí. A la mañana siguiente me tomé el dia libre, dejé mi bicicleta con ellos y me fui a dedo a Putre, para aprovechar de conocerlo ya que no lo tenía considerado dentro de mi ruta y nunca se sabe cuando volveré. Además tenia que ir a comprar comida para los próximos días que se venían en el altiplano. Putre muy tranquilo y acogedor, chiquitito, monono como dirían algunas señoras. Estuve en par de horas y de ahí me volví a dedo a el lago, para seguir camino a al salar de Surire que era la próxima parada.
Sin embargo tuve la mala suerte que el camión que me llevo se quedo en pana a mitad de camino. Así perdí como 3 horas y tuve que quedarme otra noche más en el refugio.
Haz click aquí para ver todas las fotos de la historia.